Descubrimos un nuevo sitio en Ciudad Real, La Pajarería, una vinoteca-cervecería situada en el corazón de la ciudad, donde sus propietarios, Inma y Luis, han cuidado hasta el mínimo detalle para que disfrutes de agradables veladas.
Su historia es la de una reinvención, el local se llama así por que antes era una pajarearía, y la idea era mantener ese recuerdo, pero ahora ofreciendo vinos de calidad y tapas frías selectas. El servicio es muy atento, la carta de vinos es completa, pudiendo disfrutar por copas todos sus vinos, o adquirir la botella. No disponen de cocina, pero las tapas frías y las tablas de embutidos o quesos son especialmente selectas.
La decoración está muy cuidada, jugando con motivos artesanales de forja, cerámica o madera, y siempre con la idea de recordar la tienda de animales. La sensación en general es acogedora y agradable, hasta el punto de que nosotros pasamos con intención de tomar un vino y nos pasaron más de dos horas voladas.
Su selección de vinos está cuidada, presenta una buena variedad, destacando vinos de la tierra de señalada calidad, junto a algunos de otras regiones tradicionalmente vitivinícolas. En cuanto a las tablas, destacan embutidos ibéricos, de wagyu y quesos excelentes. Nosotros disfrutamos de una cecina de wagyu y de un queso con boletus, que acompañado de vinos de la tierra nos hicieron pasar una muy agradable velada.
El vino, la comida, la compañía, el marco y el cariño que Luis e Inma han puesto en este proyecto, hace que les felicitemos y les demos todo nuestro apoyo, animando a la gente a visitarlos, cuando escapemos de cada una de nuestras jaulas cotidianas, llámense casa, aula o trabajo.